Elegir a un personaje como la figura mas destacada de un año específico presenta muchas dificultades, dada la diversidad de situaciones, aspectos, efectos, preferencias que impiden asumir a una persona como "la más". sin embargo, el ejercicio tiene algo bueno: nos pone a pensar en hechos y personajes que merecen destacarse, por sobresalir y generar impacto en algún campo de la vida social. En mi caso, el personaje del año 2023 son varios en uno: los cuatro niños perdidos en la selva después de accidentarse la avioneta en la cual viajaban. ellos son: Lesly jacombaire Mucutuy, de 13 años, Soleine jacombaire Mucutuy, de 9 años, Tien Noriel Ronoque Mucutuy, de 4 años y Cristín Nerimán Mucutuy, de 11 meses.
Fue el primero de mayo de 2023. Una avioneta cayó en algún lugar de la selva del Guaviare. Tres adultos y cuatro niños eran los pasajeros. Cuando se localizó la nave, los cadáveres de los adultos se encontraron en el lugar. Los niños habían desaparecido. Se inició así una gesta que involucró al ejército colombiano, indígenas de la región y de otros lugares, el seguimiento de los medios y la atención de una población conmovida y solidarizada con la tragedia. ¿Dónde estarían los niños? ¿habrían logrado mantenerse después de abandonar el sitio del accidente? ¿Hacia donde dirigir la búsqueda? ¿Quiénes la liderarían dada la desconfianza mutua entre ejército e indígenas?
Fueron cuarenta días de búsqueda incansable, de conflictos y acuerdos, de aprendizajes mutuos, de combinación de tecnologías de punta con saberes ancestrales, de historias conmovedoras- la pérdida de un perro especializado en búsquedas y las brigadas que durante varios días intentaron hallarlo sin lograrlo-. Cuando los cuatro niños fueron hallados, la sorpresa fue general. Lesly aplicó las enseñanzas adquiridas en su medio-dónde buscar comida, cómo evitar consumir frutos venenosos, dónde acampar, dónde buscar agua, cómo protegerse de los insectos, de las serpientes y alimañas-, en fin, todo un tratado de supervivencia imposible de imaginar en niños urbanos.
Lo que me conmueve de esta historia es que por un momento, toda Colombia se unió en un acto de esperanza y solidaridad pocas veces vista entre tanto odio generado por intereses y poderes a quienes solo interesa su propio bienestar. Me sorprende la lección que nos dieron estos niños al sobrevivir en un medio en el que ni niños ni adultos de otras regiones hubieran podido aguantar dos días. Enseñanza aprendizaje en contexto, verdadera educación para la vida y lo mejor, el amor de los cuatro hermanos- con una bebé necesitada de protección, comida y afecto.
Mi deseo: que los colombianos miremos a los habitantes del as zonas periféricas de Colombia con otros ojos- son nuestros paisanos, no son menores de edad ni seres despreciables-; mas allá de las noticias de orden público existen comunidades que a pesar de carecer de puestos de salud, empleo digno, comodidades y paz luchan a diario para existir y alcanzar los logros de la otra Colombia.