EL TIEMPO LIBRE
Con el discurrir de los siglos, el trabajo adquirió la condición de elemento fundamental individual y colectivo. Las actividades intelectuales fueron aceptadas también como trabajo y con el advenimiento del capitalismo, el trabajo adquirió el estatus de soporte fundamental de las actividades humanas.
Solo a finales del siglo XIX se comenzó a hablar de tiempo libre, entendido como ese lapso durante el cual las personas recuperaban energías para continuar las labores del día siguiente. Jornadas extenuantes de 12, 15 y hasta 18 horas de labor productiva no permitían a los trabajadores imaginar tiempos dedicados a labores distintas, mas placenteras. A partir del siglo XX, el avance del capitalismo permitió fijó reglas para determinar el carácter dual de la existencia humana: tiempo para laborar, tiempo para descansar. Nociones como tiempo libre, ocio, recreación se incorporaron a las dinámicas de la cotidianidad.
Roger Bregman, joven historiador holandés -29 años-, publicó un libro que se volvió un best seller mundial, "Utopía para realistas", en el que plantea algunas propuestas:
Ingreso básico universal, 15 horas de trabajo semanales o un mundo sin fronteras...Esa forma de hacer olvidar los afanes laborales cotidianos en busca de un nivel mínimo de vida material, combinada con una reducción del tiempo de trabajo, son fórmulas en apariencia irrealizables; pero son posibles gracias al progreso productivo acumulado por tres siglos. Es una manera de cosechar los frutos del progreso: dejar a las máquinas y a la inteligencia humana-condensada en la inteligencia artificial- hacer el trabajo para que , finalmente, el tiempo mas importante sea el tiempo libre y no el tiempo de producción"(Contra la pobreza, Andrés Alvarez, Jimena Hurtado, Arcadia).
La duda: ¿será posible reinventarnos como seres humanos capaces de desdeñar el consumo como elemento acaparador de nuestro tiempo libre?
El miedo: ¿Hasta qué punto los dueños del mundo estarán dispuestos a aceptar la distribución de la riqueza como la plantea Bregman?
Como es tan difícil hacer predicciones, señalo algunas tendencias que creo, están redefiniendo las relaciones sociales y laborales: surgimiento de empresas online que desafían formas tradicionales de entender la contratación: uber, airbnb; inteligencia artificial que transforma el trabajo, precariedad de los contratos laborales, obsolencia de muchos oficios y profesiones, obsesión por las imágenes y la conectividad que otorgan nuevas maneras de darle sentido a la existencia. Así, los tiempos de trabajo y descanso adquieren nuevos rasgos.
Yo, provinciano irredimible, mejor me dedico a caminar por los senderos tentadores de los alrededores de Guaduas, a sorprenderme ante el vuelo encantado de mariposas multicolores, de aves cantarinas y ante la majestuosidad de las montañas verdes de mi pueblo, antes de que desaparezcan por la presión de los urbanizadores voraces.
Y que sean los jóvenes quienes nos muestren senderos novedosos para vivir a plenitud los momentos en los que el cuerpo y la mente se transforman al paso delicado de la poesía y la naturaleza, la música y el erotismo, la contemplación y la creatividad. Por un momento, creer que es posible una sociedad menos opresiva y mas generosa. La otra utopía.
Me gusta mucho, Dago. Solo hay una parte que no comparto. La de que sean los jóvenes los que muestren nuevas formas de vivir. He conocido "viejos", entre esos usted, que son mucho más imaginativos yyvalientes que el "joven" promedio. Así que nada, la lucha por un mundo mejor requiere de todos :).
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