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viernes, 31 de diciembre de 2021





DESEOS PARA EL 2022

La llegada de un nuevo año nos llena el corazón de esperanzas, nos ilusiona con ver nuestros o sueños hechos realidad, así que enumeraré mis deseos para un año que se anuncia incierto:

Un parque ecológico para Guaduas, proyecto que se esbozó y no se cumplió.

Ver el Centro Histórico de Guaduas restaurado: el convento de La Soledad, la Casa Murillo Toro,   la calle4- Camellón Real- reempedrada o pavimentada, la restauración de las casas que amenazan ruina, las aceras uniformes, organización del comercio informal, control al crecimiento incontrolable de palomas en la plaza de la Constitución. Si de verdad queremos que Guaduas sea un pueblo patrimonio, es urgente la recuperación del centro histórico.

Un plan de ordenamiento territorial que preserve zonas amplias del sector rural para la agricultura, la ganadería y las reservas naturales

Una política municipal que le ofrezca a la educación rural un proyecto para instalar y fortalecer la conexión a internet, aunado a un programa de formación docente que le apueste a un currículo pensado para ofrecer educación pertinente, con bibliotecas dotadas de libros diversos, material educativo, intercambios con escolares de la zona urbana, salidas culturales a diversos lugares de la región. 

Un parque infantil digno de una población numerosa que no cuenta con espacios  para la recreación.

Una verdadera política cultural que estimule la diversidad cultural, dé espacio a las culturas juveniles, integre a la población migrante de Venezuela, tenga una oferta de talleres, conferencias, seminarios,  ofrezca formación en nuevas tecnologías, propicie la integración de  jóvenes en proceso de formación técnica y universitaria, estimule la creación de medios virtuales y físicos para divulgar la voz de los estudiantes de educción técnica, tecnológica y profesional de Guaduas.

Ver el inicio de la construcción de la sede de la administración municipal para que se le devuelva  a la universidad su espacio.  y por supuesto, una estrategia para ofrecer con autonomía formación técnica y universitaria de calidad.

Un aumento significativo de personas que apoyen el plan Padrino de la Fundación Antonio Romero Guzmán.


El plan maestro de alcantarillado, una tarea ineludible para rescatar el río san Francisco. 

Son muchos los deseos, así que formulé algunos. Otros quedaron por fuera. Estoy seguro de que mis lectores completarán este inventario de deseos, cuya única finalidad es la de imaginar a  Guaduas como espacio amoroso, grato, justo.

Aclaro que no estoy en campaña electoral, no tengo pretensiones de aspirar a cargos públicos y solo aspiro a poder caminar en paz por los senderos del valle que nos roba el aliento y nos motiva a compartir la amistad con amigos entrañables.

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sábado, 4 de diciembre de 2021



UNA LIBRERÍA EN GUADUAS

Crucé una breves palabras con Laura Acero, autora de "Viajes de campo y  ciudad" en la sede de Espantapájaros en Bogotá,  donde conversó con Yolanda Reyes, ante un pequeño grupo sobre la promoción de lectura- ella tiene su propio proyecto: Bibliocarrito R4, biblioteca itinerante que recorre en Renault 4  la geografía nacional con el empeño de compartir lecturas y charlas con niños y adultos-  y cuando le conté que yo era de la tierra de La Pola  me dijo: sueño con tener una librería en Guaduas.


Esa  idea me conmueve. ¡Una librería en mi pueblo! Y como soñar no está todavía prohibido, voy a contarles como la imagino: Localizada en la Plaza de la Constitución, en un local sencillo, con fotografías de Guaduas antigua y reciente, obras de pintores locales, materas con flores de la región, los libros dispuestos de tal manera que se visualizan en sus portadas, una oferta de café delicioso, de bebidas,  jugos y  helados, el periódico listo para que sea leído por los visitantes, colaciones elaboradas por artistas del paladar, música del mundo a bajo volumen, toneladas de conversaciones, charlas de gente de los libros, del arte y la ciencia,  de personas del municipio que desde sus oficios narran la épica cotidiana que teje la telaraña comunitaria, un proyector o tv para ver videos y películas; en fin, un espacio para gozar.

La lectura y la conversación son hermanitas gemelas, nacen de la curiosidad y el afán de plasmar en palabras el ritmo cautivante de un universo en perpetuo cambio.  Y sea en comunidades aborígenes en las que la palabra discurre como el viento para narrar las leyendas y mitos unificadores, en comunidades pequeñas en las que una esquina es el epicentro de relatos donde se filtran las historias cotidianas del lugar, en ciudades provistas de lugares hechos para el diálogo, en espacios en los que se viaja con el tiquete de la imaginación, en aulas donde se debaten a autores e ideas, siempre existirá la necesidad de compartir las semillas de la curiosidad que nos ofrecen una buena lectura y una buena conversación.


¡Qué bello sería contar con una librería en Guaduas, acogedora, actual, para todos los públicos, apoyada por esa masa invisible de seres amorosos del saber, de la conversación, del intercambio de ideas!