SUICIDIO Y LUGARES
Yukio Shige recorre periódicamente los acantilados de Tojimbo, no para deleitarse con el paisaje imponente del mar arrebatado, sino en busca de posibles suicidas. Tojimbo es uno de los lugares preferidos para suicidarse en el Japón. Y Yukio, policía retirado, trata de persuadir de no hacerlo a las personas que acuden a este lugar para poner fin a sus días.
¿Qué atrae a estos sucidas para escoger un lugar como Tojimbo? Allí, el mar golpea con fuerza los acantilados, y el lugar escogido se encuentra a una altura considerable, por lo que no hay posibilidades de sobrevivir. En Colombia, algunos sitios populares para suicidarse, como el Salto de Tequendama, poseen características similares. ¿Existe alguna relación entre altura, agua y vacío como elementos propicios para cometer este acto definitivo? Hace ya un buen número de años, los suicidas de Medellín tenían como sitio preferido el antiguo Palacio Municipal, y en Bucaramanga debieron realizar algunas reformas a un puente vehicular para evitar los saltos al vacío de aquellos que habían decidido matarse.
Tal vez, el sueño fallido de volar se manifiesta de manera brutal en el salto definitivo. Los sueños humanos semejan el intento de Icaro de acercarse al sol. Un vuelo, el último, para conciliarse con alguno de los elementos naturales, aquellos que los griegos consideraron el origen de la vida: agua, tierra, aire, fuego.
Hay algo interesante en el acto de suicidarse: es una hazaña que no se puede contar, nadie puede contar a carcajadas a otro que una vez se suicidó. Tal vez los suicidas, en el fondo de su alma, esperan que su hazaña sea contada. Pero, eso sí, tienen que competir con los estallidos de bombas, las caderas de shakira, los discursos de los pelmazos de gobernantes que tenemos... Es curioso que escojan sitios tan similares, pero es más curioso este personaje que se dedica a salvarlos. ¿Por qué lo hace? ¿Hasta qué punto puede una persona sentir como propio el dolor ajeno?
ResponderEliminar¿será que un paisaje puede ser tan sublime que lleve a una persona al suicidio, o serà que la melancolía que se siente lo conduzca a ese lugar propicio para ejecutarlo?. Lo cierto es que quien se suicida es como si tuviera una venda en sus ojos para no apreciar las bellezas que tiene la vida.
ResponderEliminarDurante nueve meses de nuestra vida (puede ser más o puede ser menos) permanecemos en un cálido ambiente líquido, un pequeño universo que ofrece protección como nunca más la volveremos a sentir. Tal vez sea por ello que tantos suicidas recurren al agua como fin último...
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